José Antonio Martín Macías, tardará tiempo en olvidar la madrugada del jueves, cinco de noviembre de 2009. Alrededor de las 04.30 recibió una llamada telefónica en el hospital Virgen del Puerto de Plasencia donde se encontraba con su esposa, Paulina Hernández, que está internada, alertándole de que el secadero de tabaco burley, y la enramada que el matrimonio tiene en La Cardenilla, ubicada en término municipal de Jaraíz de la Vera, estaban envueltos en llamas.
Cuando José Antonio Martín llegó a la explotación agrícola, al frente de la cual se encuentra su mujer, el espectáculo que encontró fue desolador: "doce mil kilos de tabaco achicharrados... prácticamente el trabajo de todo un año hecho cenizas en un rato", señalaba apesandumbrado en la mañana de ayer, tras atender a la Guardia Civil que instruye las diligencias oportunas para esclarecer los hechos. Estaba pendiente "de la intervención quirúrgica de mí mujer para venir a deshojar el tabaco, cuando nos ha ocurrido esto", apuntó.
En cuanto a las causas que motivaron el origen de las llamas, no supo precisarlas. En cambio las pérdidas las cifró, "sin saberlo con exactitud", en más de 270.000 euros, ya que hay que incluir el tabaco, los edificios y algunos aperos.
Los secaderos pertenecen a un pequeño núcleo de construcciones, en las que hay viviendas y naves con tabaco, vehículos y aperos de otros agricultores. "A las 04.30 de la madrugada, el incendio estaba ya bastante avanzado", señala Carlos Marín, un aparcero que habita en una casa próxima a los inmuebles siniestrados. "Menos mal que no hacía mucho viento", lo que evitó que las llamas se propagaran a otros edificios.
FAUSTINO MARTÍN
El Periódico Extremadura
No hay comentarios:
Publicar un comentario